Necrosis Pulpar
¿Qué es la necrosis pulpar?
La necrosis pulpar, o gangrena pulpar, es la muerte del nervio del diente. Esto ocurre como consecuencia de la aparición de una inflamación aguda y crónica, la cual comienza en la zona coronal del tejido pulpar, y que seguirá extendiendo hasta la pulpa radicular.
Puede aparecer necrosis pulpar total o parcial, en función de la cantidad de pulpa que se vea afectada. Los productos que aparecen como resultado de la necrosis son tóxicos, por lo que van a provocar la inflamación del tejido.
La necrosis pulpar en ocasiones, puede aparecer como consecuencia de un traumatismo. Esto es debido al bloqueo del aporte de sangre de forma inmediata, sin que haya una inflamación previa.
Tipos de gangrena pulpar
Podemos clasificar la necrosis pulpar como:
- Necrosis por coagulación o aséptica: en este caso se ve disminuida de forma importante, o bloqueada completamente, la circulación de la sangre. La necrosis aséptica no produce habitualmente dolor.
- Necrosis séptica o gangrena que aparece debida a la aparición de las bacterias y se asocia a una gran cantidad de exudado inflamatorio. La necrosis séptica provoca un dolor brusco y muy intenso como consecuencia de la aparición de toxinas bacterianas..
Complicaciones de la necrosis pulpar
Las complicaciones más frecuentes son cuadros periapicales: osteomielitis, fístulas, granulomas, celulitis etc.
Tratamiento de la necrosis pulpar
En cualquier situación de necrosis pulpar, el tratamiento de los conductos radiculares estará siempre indicado.
Con la realización de una Endodoncia a su debido tiempo, podemos frenar la gangrena y salvar el diente afectado. Se trata de un procedimiento sencillo donde se eliminan las partes blandas del diente. Así, evitarán que la necrosis se extienda y sea necesario en un futuro la extracción del diente.
Es un tratamiento muy efectivo. Pero si no lo llevamos a cabo en pacientes afectados con necrosis pulpar, van a tener riesgo de perder el diente. Además, la infección puede extenderse al resto de la boca y sufrir en los casos más graves complicaciones cardiovasculares.
Si la necrosis está demasiado avanzada, la solución es la extracción del diente.
Es importante por tanto de que a pesar de que remita el dolor, es recomendable acudir a tu dentista, con el fin de realizar un estudio clínico y radiográfico para estudiar el estado pulpar del diente.